Paz Padilla es una de las personas más conocidas de la televisión en nuestro país desde hace ya muchos años. Además de presentadora de programas, también es actriz y humorista entre otras cosas. Ahora ha presentado su libro titulado “El humor de mi vida”.
El humor de mi vida, una historia de amor contada con humor
Según palabras de la propia Padilla, «este libro es una historia de amor contada con mucho humor, sin pelos en la lengua, sin tapujos y sobre todo y lo más importante, sin ninguna clase de miedo«.
Ninguna persona nace preparada para morir y son pocas las personas las que cuando llega el momento, están preparadas de forma adecuada. Aunque parezca lo contrario, somos una sociedad que vive de espaldas a la muerte por puro terror. Intentamos rehuir a la hora de hablar de ella, no queremos reflexionar acerca de su existencia. Incluso… podemos llegar a negarla con la vaga pero inane esperanza de evitarla.
Gracias a la narración de su peculiar historia de amor, Paz Padilla comparte el trabajo personal de aceptación llevado a cabo para poder acompañar a su marido en sus últimos días. En las páginas de «El humor de mi vida» podemos ver cómo el amor se va mezclando con el humor descarado que tiene la gaditana, con palabras acerca de la muerte que se evaden de los tabúes y sin ningún miedo.
Un repaso a su vida desde que conoce a su auténtico amor
En las páginas de esta publicación podemos vivir un repaso de su historia, desde que en 1983 conoce a Juan Vidal a los 14 años y fueron novios, hasta su fallecimiento en el año 2020. Pasando por su ruptura en 1994 y cuando ella dio sus primeros pasos en el mundo de la televisión y se fue a Madrid así como la segunda oportunidad que se dieron en el año 2012.
Padilla es explícita a la hora de describir este libro: “Amor, muerte y humor”, tres palabras que escapan a las alambradas que todos los seres humanos nos empeñamos en construir en torno a ellas. Son tres palabras obligadas a coexistir. Uno no se muere de amor, como suele decirse, se muere si no se ama y para poder morir sin miedo, es necesario amar la vida.
El libro es testigo de un largo viaje en el que la autora ha aprendido mucho sobre la vida, el amor y también acerca del acompañamiento a un paciente moribundo, la muerte y también sobre sí misma, más de lo que nunca llegó a imaginaren su vida.